IMPORTANCIA DE LOS TRASTORNOS MÚSCULO ESQUELÉTICOS DE ORIGEN LABORAL
Según la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo, uno de cada cuatro trabajadores de la Unión Europea está aquejado de dolores de espalda y otro 23% de dolores musculares. Son millones de trabajadores europeos los que se encuentran afectados por los trastornos musculoesqueléticos en diferente grado. En España, los trastornos músculo esqueléticos son la primera causa de absentismo laboral, según los datos recogidos por la Sociedad de Prevención de Fremap. Dentro de este tipo de dolencias, las más frecuentes se dan en la región dorsal baja (40%), seguido de en cuello y hombros (37%), miembros inferiores (32%), región dorsal alta (27%) y miembros superiores (20%).
Según Fremap, estos trastornos pueden ser consecuencia de diversos factores, entre los que cabe destacar las posturas incorrectas ante el ordenador, condiciones ergonómicas (mobiliario, iluminación, etc.), así como factores intrínsecas al propio individuo (defectos visuales, lesiones preexistentes, etc.). Gran parte de ellas se podrían evitar con un buen sistema de vigilancia de la salud.
Los trastornos musculoesqueléticos reducen la rentabilidad de las empresas" y, por el contrario, "aumenta los costes sociales públicos, reducen la empleabilidad y la capacidad laboral de los afectados y, por lo tanto, es importante afrontar este grave problema desde un punto de vista moral y ético
(Jukka Takala, director de la Agencia Europea de Seguridad y Salud)
El coste económico de los trastornos músculo esqueléticos se estima en el 1,6% del PIB de la Unión Europea, aunque en algunos países este porcentaje puede alcanzar hasta el 3,1% de su PIB. Además, el informe Word Economic Forum estima que el retorno para las empresas que invierten en programas de este tipo por cada euro invertido es de entre 2,5 y 4,8 euros por absentismo y de entre 2,3 y 5,9 euros por costes de enfermedad.
Por todo esto, la ergonomía es un aspecto muy importante a tener en cuenta para realizar una identificación y evaluación de riesgos completa. Aunque a veces no se valora lo suficiente ya que las consecuencias se suelen presentar a largo plazo, además las deficiencias ergonómicas no son tan evidentes y llamativas como las deficiencias de seguridad o higiénicas.